Sacando Barro en Buenos Aires.

Deje la Bici y mi viejo me presto el auto, aproveche y me fui a Buenos Aires a ver al loco Seba Altieri. Ademas de un gran amigo, Seba es quien me saca el barro de los dientes en cada visita a Argentina.

Mientras atendia a sus pacientes subi a la casa donde vive estos dias y me puse a jugar con Donata, DOnata ya tiene 4 años y como la veo 1 vez por año, cada vez me sorprende. Esta vez es impresionante lo bien y la cantidad que habla, estuvimos discutiendo algunos asuntos y mientras me mostraba todos los vestidos que le habian regalado para navidad, saca mas fotos.

con el vestido rosa.

Sacando la lengua.

Mas tarde Donata se fue a tomar un helado con su madre y me fui con Seba al consultorio. ahi aproveche que estaba con su paciente y me puse a investigar todas las herramientas que tiene el loco.

El Dentista.

Las herramientas de los dientes

pinches.

Por la noche Cervezas y pizzas hechas por olga (la suegra de Seba), riquisimas. Risas y planes de ir al sur cerraron la noche.

Mas tarde deje a la familia dormir en paz y arranque a la casa de Chana y Augusto, donde me esperaba birra fresca, una terracita y mucha conversacion con Laura, Ceci, Chana y mas tarde Augusto. En el patio seguimos la charla y con las horas el volumen de la voz subio, se escucho un SHHHHH!! al que no le hicimos mucho caso y seguimos en la nuestra. De repente en el medio de la mesa cae un baldazo de agua totalmente de sorpresa, mojandonos a todos.

Cuando miramos para arriba no vemos nada y ahi empezaron los dueños de casa con las conjeturas de quien habia sido. Despues de hablar con el portero, llagaron a la conclusion que habia sido la del 2do, de uno 50 años, nacionalidad paraguaya, que vive con un viejo de 80 y una nena de 5, formando un hogar muy atipico.

Una vez identificado el supuesto agresor, comenzo la tarea de la venganza, Augusto tomo la iniciativa y subio con un balde de agua y veneno de ratas y se lo vacio por debajo de la puerta de su casa.

A partir de ahi pusimos musica dentro de la casa, bailamos por un rato y volvimos a Campana alla por las 4 am.

La historia imagino que seguira, espero que Chana y Augusto me cuenten de los nuevos episodios de la guerra de baldazos en el edificio de Corrientes y Callao.